
Jueves 20 de octubre de 2016
Jueves 20 de octubre de 2016
Este verdadero paraíso arquitectónico estuvo oculto por más de 500 años.
El "sueño azul", "el mar sobre los techos" o simplemente "el pueblo de los Pitufos", así es conocida la pequeña localidad marroquí de Chefchaouen. Ubicada al norte del país, sus calles, casas y paisajes son tan normales como los de otras localidades del mundo, excepto por una particularidad: todo está pintado de azul ¡Sí, de azul!
¿Pero y por qué es azul? La verdad, nadie lo sabe con total certeza, pero muchas teorías apuntan a que los antiguos habitantes prefierieron este color, por sobre cualquier otro, debido a que este era el único capaz de ahuyentar a las moscas.
También hay quienes dicen que, al ser una ciudad que sirvió de refugio para mucho judios europeos perseguidos por el fascismo, fueron estos mismos los que a partir de 1930 empezaron a pintar puertas y fachadas para reemplazar el color verde propio del Islam que rige en gran parte de la población marroquí.
Por otro lado también hay quienes indican que la explicación de por qué todo sea azul es simple: los antiguos habitantes querían vivir en un lugar que fuera lo más parecido al cielo.
Pero ¿por qué sabemos tan poco de una ciudad que debería estar en todos las páginas de viajes? La respuesta es que se trata de una localidad que se mantuvo oculta durante más de 500 años, convirtiéndose así en un auténtico refugio de personas que buscaban escapar de las numerosas guerras que acontecían en Europa.
Chefchaouen fue refugio para minorías judías y musulmanas que dejaron Europa. Pero en el siglo XX, la ciudad fue finalmente capturada por España y así se abrieron sus puertas.